by Victoria O
Published on: Apr 25, 2005
Topic:
Type: Opinions

Hoy me tocó enviarle una carta al Presidente de la república de Chile el Señor Ricardo Lagos Escobar , en representación de la juventud, haciendo una petición
muy importante, de la cual depende el futuro de nuestra ciudad. Como ya he hablado de lo sucedido en La Décima Región de Chile, específicamente la provincia de Valdivia, con los problemas referentes al funcionamiento de la planta de Celulosa Arauco ubicada en la comuna de San José. Toda la población sabía que ellos eran culpables de la destrucción de nuestro santuario de la naturaleza y las diferentes
enfermedades que han afectado a nuestra comunidad este último tiempo. Se han hecho protestas pacíficas, movilizaciones, en diferentes ciudades del país, de
norte a sur, gente sensibilizada dándonos su apoyo, incluso cuando ellos ni siquiera viven acá no tendrían por qué entenderlo pero sienten lo mismo que nosotros. Hay un cierto grado de hermandad que se ha generado a lo largo de Chile, lo que a nosotros como valdivianos nos pone muy contentos, nunca había pasado esto antes en toda la historia de nuestro país. La juventud en distintas zonas, exigiendo al gobierno que se respete la vida. El pasado lunes, 18 de abril, tuvimos una noticia que nos hizo llorar de emoción a mi y a muchos de mis compañeros en esta lucha. Se dió a conocer el tercer estudio de impacto ambiental realizado por la Universidad Austral de Chile, Informe contratado por la CONAMA (Comisión Nacional de Medio
Ambiente). El cual nos tuvo viviendo en una incertidumbre por un buen tiempo,
el miedo a que CELCO interviniera otra vez a favor de él mismo, pero no fue
así y lo tomamos como un acto de valentía de la Universidad, al concluir que la
muerte y emigración de los cisnes de cuello negro fue originada por la desaparición del luchecillo, alimento principal de los mismos. La muerte del luchecillo se debió a los altos contenidos de metales pesados en el medio, particularmente Hierro. Los análisis realizados por la UACH y datos de monitoreo de la misma planta, muestran que los cambios observados pueden ser relacionados a los cambios significativos en la calidad del agua del Río Cruces, después de la puesta en marcha de la planta. Por otro lado tuvimos un Panel de Impactos en la Salud derivados de la producción de celulosa organizada por el Colegio Médico de Chile y Facultad de Medicina de la Universidad Austral de Chile; donde se expusieron temas como políticas de desarrollo actual que afectan el medio ambiente y la salud. Efectos agudos, crónicos y diferidos en la salud por exposición a dioxinas y organoclorados ; relación temporal y espacial entre el daño del Santuario de la Naturaleza y la Producción de Celulosa; y por último incumplimientos a ley ambiental y la fiscalización que ponen en riesgo la salud. También se realizó un cabildo abierto a la
ciudadanía, con el propósito de informar a la población y ver como hacer que
el gobierno tome acciones inmediatas frente a este tema. Al final de la jornada en un programa de televisión de protección ambiental llamado la Ley de la Selva que nos ayudó a que todo el país supiera lo que pasaba en nuestra ciudad. Nos hizo un reconocimiento como ciudadanos, por lo que habíamos logrado, que podemos ganarle al gigante que está tambaleando; entregaron a Daniel que fue
representándonos al programa un cuadro que decía : LA ÚNICA BATALLA
QUE NO SE PUEDE PERDER ES LA QUE LIBRAN LOS HOMBRES JUSTOS POR LA VIDA. Me emocioné muchísimo al verlo, y me sentí orgullosa de ser parte de este
movimiento, orgullosa de ser valdiviana y pelear por una mejor calidad de vida, no sólo para mi si no para los que vendrán después de mi. no habría podido quedarme en mi casa, sentada y de brazos cruzados cuando todo esto estaba pasando a través de mi ventana. Tenía que salir a luchar, y lo seguiré haciendo hasta que se me acabe toda la fuerza. Me siento muy agradecida de esta oportunidad que se me da de pertenecer a esta generación y tener la posibilidad de hacer algo para
cambiar al mundo. Lograremos los Objetivos de Desarrollo del Milenio, sólo debemos seguir trabajando juntos. Vamos que se puede!

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