by Rosa Isabel Montero Torres | |
Published on: Mar 30, 2007 | |
Topic: | |
Type: Opinions | |
https://www.tigweb.org/express/panorama/article.html?ContentID=11905 | |
Los Consejos de Juventud son la principal instancia de participación juvenil reglamentada por el Estado Colombiano; sin embargo, desde su aparición en 1997 se han tornado en ESPACIOS DE REPRESENTACIÓN FICTICIA, porque los jóvenes que los integran no reciben suficiente información en torno del rol que les corresponde como Consejeros, y tampoco son enterados de la responsabilidad que implica ser uno de sus miembros. Los jóvenes debemos estar informados de cuáles son las barreras que nos impide avanzar, para poder eliminarlas. Algunas de estas barreras son: corrupción, falta de objetivos, burocracia, legislación deficiente, ignorancia, tráfico de influencias, falta de fundamento y experiencia, carencia de realismo y de fiabilidad de los proyectos, poco entendimiento y poca familiaridad con los asuntos juveniles. Resulta preocupante saber como más del cincuenta por ciento de los jóvenes cartageneros NO SABEN lo que es el Consejo de Juventud; y muy frustrante que los que si saben, lo miran como un concurso de talentos, no lo toman en serio o consideran que no sirve para nada. Realizan campañas y se hacen elegir porque creen que en el Consejo encontrarán presupuesto para realizar sus proyectos, conseguirán relacionarse con los políticos de la ciudad u obtendrán prebendas y bonificaciones económicas, etc. Pero el Consejo de Juventud es más que eso; hacer parte de él significa ser consciente de que se está representando a los jóvenes ante las autoridades de la ciudad, a las cuales, por ser responsables de velar por su efectivo desarrollo, DEBE EXIGÍRSELES QUE DICTEN LAS POLÍTICAS NECESARIAS PARA ELLO. También debe el Consejero estar consciente de que es responsable de MOSTRAR A LOS DEMÁS JÓVENES la realidad de la juvenil en el distrito, y cómo debe ser el comportamiento del gobierno para mejorar esta realidad. Si quien aspira a conformar el CDJ no esta al tanto de esto, no puede llevar a cabo con éxito su gestión; y con ello perjudica fatalmente a la juventud que representa. La irresponsabilidad de las autoridades en la formación de los líderes juveniles, se ve reflejada en la forma como son convocados para que inscriban sus nombres para las elecciones de esta corporación: animándolos a postularse sin haberlos capacitado para ello, aprovechando la coyuntura de las elecciones de personeros estudiantiles para, luego de haberse conformado el Consejo, poder decir a boca llena que se GARANTIZÓ LA PARTICIPACIÓN de los jóvenes en los espacios que les fueron creados. Es la tercera vez que se aplazan las elecciones del Consejo Distrital de Juventud de Cartagena; y los aspirantes, que tienen intención de trabajar arduamente por los jóvenes del Distrito, por haber invertido valiosa parte de su tiempo, estudiando la problemática, investigando las herramientas disponibles para solucionarla y promoviendo una actitud crítica frente a ella en sus jóvenes compañeros, están siendo tentados a claudicar en sus aspiraciones. Llegó el momento de que las autoridades se concienticen de que la dejadez de la juventud por participar en estos comicios no obedece a la falta de difusión de la jornada electoral en los medios de comunicación o al desconocimiento de los términos estipulados para la inscripción de candidatos, sino a la DESCONFIANZA PRODUCIDA POR LA FALTA DE SERIEDAD CON QUE VIENE SIENDO TRATADO EL CONSEJO DE JUVENTUD, ADMINISTRACIÓN TRAS ADMINISTRACIÓN. « return. |